Intercambio y cooperación Slow con “Vuelve Carolina” y “El Poblet” Valencia
La necesidad de conocer, aprender y compartir ha movilizado a cocineros, panaderos, pasteleros, blogueros y amantes de la cocina, que sin proponérselo, han propiciado la formación de en un grupo abierto y espontáneo de profesionales, que está explorando posibilidades de cooperación e intercambio de experiencias culinarias.
Todo empezó con una quedada organizada por Jordi Bresó, panadero, pastelero y divulgador del movimiento Slow Food Valencia, en torno a la cebolla monquelina, que a su vez dio lugar a otra cita para hablar en profundidad de los objetivos y alcances del movimiento Slow Food y sus alimentos catalogados. El Reto Solidario de la Cruz Roja representó otro reclamo para este grupo de entusiastas para sumar esfuerzos y voluntades a favor de una causa solidaria, seguido de una visita y cata a la Cooperativa de Viver para profundizar en las cualidades del AOVE Lágrima de Serrana del Espadán, por lo que sucesivamente los intercambios y sinergias se han intensificado hasta dar de sí experiencias de colaboración entre las partes.
Hoy os contamos que entre ese grupo de entusiastas que responde a la propuesta de Jordi Bresó están Germán Carrizo y Carito Lourenço, Jefes de Cocina de los restaurantes El Poblet y Vuelve Carolina, un tándem gastronómico de apasionados amantes de la cocina, responsables de estos emblemáticos establecimientos del gran Quique Dacosta en Valencia capital.
Tanto El Poblet Valencia como Vuelve Carolina destacan por fusionar tradición con innovación y excelencia, a través de una gastronomía comprometida que concede a la calidad del producto y su singularidad, el valor diferenciador que luego cobra vida a través de la creatividad de los cocineros, transformado en propuestas plenas de exquisitez gastronómica.
Cuatro días ha estado Jordi Bresó en la cocina de Germán Carrizo y Carito Lourenço, en una experiencia de colaboración inspirada en las quedadas que llevaban meses realizando, para explorar las posibilidades de incluir nuevos alimentos singulares en las cartas de El Poblet Valencia y Vuelve Carolina.
¿Qué ha salido de todo esto? Dos nuevos aperitivos basados en este intercambio de experiencias. Para El Poblet han creado un Hummus de Garrafón de la Sella Morada, producto autóctono de la Comunidad Valencia que tradicionalmente se ha usado en la auténtica paella valenciana, aportación de Jordi Bresó por su trabajo a favor de la revalorización de los alimentos de nuestras tierras, dándoles una utilidad novedosa que destaque sus potencialidades.
Este hummus se sirve acompañado de unas Crackers de harina de Garrafón, versión de Jordi Bresó inspirada en la receta de Dan Lepard originalmente de judías, que cobra una nueva entidad al utilizar un producto autóctono valenciano.
Para Vuelve Carolina la propuesta es unas “Coquetas” de Cacau del Collaret, elaboradas con harina de Escanda Asturiana, Cacau del Collaret, Sal de Añana y AOVE Vivarum, todos alimentos catalogados por Slow Food, para ofrecer a los clientes del gastrobar una versión renovada de aquella típica tosta de la zona de La Ribera, que se daba a los niños para merendar o comer entre horas.
Como todo buen equipo, las partes han actuado las unas aportando a las otras, dando de sí mucho más de lo que se podía prever en un principio, porque unidos por la pasión hacia la gastronomía y el interés por seguir conociendo y aprendiendo, se abren canales de colaboración y posibilidades interesantes que empiezan por unos alimentos y unas recetas, pero quien sabe cuánto puede alumbrar la creatividad de unos profesionales amantes de su trabajo.