La Unió de Llauradors abre la guerra del aceite en el norte de la provincia
Alerta de que se han «arrancado» ejemplares valiosos y que se ha engañado a clientes en la venta del producto. Su secretario acusa a la Taula del Sénia de «robarles» sus proyectos de promoción de los olivos milenarios.
MARíA JOSÉ SÁNCHEZ 20/12/2012
El secretario general de la Unió de Llauradors i Ramaders, Ramón Mampel, acusa a la Taula del Sénia y a la Associació Territori del Sénia de llevar a cabo «graves irregularidades» relacionadas con el proyecto de los olivos milenarios y la comercialización del aceite procedente de estos.
Mampel desenterró ayer el hacha de guerra y lanzó duras acusaciones contra ambas entidades, aunque evitó en todo momento nombrarlas de forma directa.
La Mancomunitat se ha encargado en los cuatro últimos años de gestionar el plan Aceites y Olivos Milenarios del Territorio del Sénia, por el que obtuvieron una ayuda de 1,2 millones del Estado. Aquí ya arrancan las primeras diferencias, pues Mampel indicó que la idea de salvar al patrimonio surgió de la Unió en una asamblea comarcal hace 22 años, «nos han robado el trabajo, el sudor y hasta el discurso», aseveró.
Pero no se quedó ahí, y puso en tela de juicio la capacidad de gestión del proyecto de los entes aludidos.
«No se han cumplido los objetivos que se marcaron y que eran básicamente tres: salvar el patrimonio, orientarse en el mercado y desarrollar el territorio». Mampel aseguró que «han suspendido las tres asignaturas» y arguyó que tienen constancia de que hace año y medio «se arrancaron dos ejemplares en la zona de Cataluña, en territorio que gestiona la Mancomunidad, que debían tener entre 1.500 y 1.600 años de antigüedad», un hecho que tildó de «indignante».
También censuró la comercialización del aceite milenario. «Se ha producido una dispersión, pues cada municipio tenía una marca cara al mercado, cuando a nosotros nos ha costado mucho trabajo posicionarnos con un producto de calidad», indicó.
En este sentido, denunció «uno de los hechos más graves, que puede ser considerado delito». Y es que «se ha dado el caso de algún productor que está vendiendo oro liquido como si fuera de olivos milenarios, cuando se sabe que vendió sus terrenos y no posee ejemplares de ese tipo».
Precisamente para que no se produzcan situaciones de este tipo, Mampel abogó por «buscar una figura que avale el artículo y persiga la piratería para que no se engañe al consumidor». Para el representante agrícola, «se ha hecho un dispendio poco responsable de las ayudas percibidas», «se han regalado botellas a todo el mundo, causando un perjuicio y dificultando el posicionamiento en el mercado».
No obstante, justificó las acusaciones: «Hemos querido ser respetuosos y no entrar en una guerra continua, pero nos han herido mucho y teníamos al enemigo entre nosotros. Han sido las voluntades políticas y los egoísmos personales los que nos han llevado a esta situación», aseguró.
Sin embargo, dejó una puerta abierta al diálogo. «Son tiempos difíciles y la solución no es miramos al ombligo ni políticas de campanario, sino aunar esfuerzos porque tenemos un tesoro y hay que racionalizarlo», dijo. Mientras, «seguiremos vigilantes para protegerlo erradicar la especulación y la usurpación», concluyó.
Fuente: www.elperlodlcomediterraneo.com